domingo, 7 de septiembre de 2008

¡10 kilómetros!

El pasado 31 de agosto tuvo lugar la Human Race de Nike, una carrera de 10 kilómetros que transcurrió por las calles de Madrid y de otras 24 ciudades del mundo. Una forma ambiciosa de patrocinar una marca y de que los que disfrutamos con el correr salgamos de la rutina de dar vueltas al Retiro. Una buena crítica de la carrera, en el blog de mi amigo Jose Ignacio.

La verdad es que tenía ganas de correr esta carrera y quitarme la espinita de la San Silvestre del año pasado, la cual mi cuerpo decidió de forma autónoma que no pensaba correr, independientemente de la opinión de mi mente.

Pero realmente no iba con muchas esperanzas, principalmente por la falta de entrenamiento durante los meses de verano y por la molestia que padezco en la rodilla derecha, ya conmigo desde hace 9 meses....

No obstante allí nos plantamos mi amigo Juan y yo, a ver lo que ocurría. Como mal peor, llevábamos el metrobus, así que en cualquier momento pensábamos coger el metro. Y la cosa no empezó del todo bien que digamos.... La carrera tenía una duración máxima de hora y media, marcada por los coches de seguridad que harían el recorrido en ese tiempo. Como había tantos corredores, a la hora de salir ya era pasado el minuto 7 de tiempo, y al torcer la primera esquina, ya llevábamos detrás a dichos coches que, como si de recolectores de basura se tratasen, avanzaban imperturbables hacia nosotros.... Afortunadamente, a partir del kilómetro 3 cogimos tirmo, aceleramos un poco y los conseguimos perder de vista....

Finalmente conseguimos aguantar los dos, a pesar de la dureza del último tramo, en cuesta arriba, y a las molestias de la rodilla. Aquí abajo se puede ver una foto del triunfal momento, el cual quedó eclipsado por un valiente chico minusválido que acabó a la vez que nosotros. Como se puede apreciar, Juan y yo solo teníamos ojos para la meta, pero la meta no para nosotros....


¡Meta!

El caso es que felizmente acabamos ya hora me toca 1 mes de descanso por recomendación del traumatólogo, para volver a la carretera justo para la carrera del BBVA. Eso sí, ¡este año no se me escapa la San Silvestre!


¡Puesto 159.013 del mundo!


De vuelta de vacaciones: Tenerife

Según desembarcamos del avión desde Turquía, fuimos a casa, sacamos la ropa, lavamos la ropa, guardamos la ropa y vuelta al aeropuerto camino de Tenerife.



Está vez cambiamos a Javi por Javier, que aunque se llamen igual, no son la misma persona. 10 días de Tenerife nos esperaban por delante, donde podríamos descansar después de la paliza física turca. La casa de Javier en Santa Cruz de Tenerife nos esperaba.



Y básicamente así fue el viaje. Arena, playa, arena, compras (aprovechando las rebajas y los precios más bajos que la península), arena, un poco de mal tiempo y arena. Entre todas estas actividades cabe intercalar la guagua, o autobús, que tuvimos que coger en varias ocasiones para salir de la ciudad e ir a la zona playera.



No vimos nada de la zona, salvo un día que salimos a Puerto de la Cruz. Después del atracón de ver ruinas turcas, lo único que se nos hacía apetecible era reposar en posición horizontal :-)

Todas las fotillos, cortesía del propio Javier, aquí.

De vuelta de vacaciones: Turquía

Hace ya más de medio mes que volví de vacaciones y una semana desde que volviese a trabajar. La actualización de este blog se ha ido posponiendo hasta alcanzar un grado de holgazanería vergonzoso. Así que a ver si me pongo hoy y organizo todo como es debido.


Nosotros, valientes viajeros

Primero estuve de viaje por Turquía, en compañía de Miguel, Javi y Vir. Elegimos un tour que nos llevó desde la Capadocia, en el centro del país, hasta Estambul, la capital. En el camino vimos Pamukkale, Bursa, las ruinas de Hierápolis, las ruinas de Éfeso, la ciudad de Konya....


Vir, frente la estepa turca

En general resultó un viaje muy agradable, el cual merece mucho la pena. Vimos sitios muy distintos y variados, desde las zonas turcas más profundas y rurales, hasta Estambul, que es casi como una ciudad europea.


Piscina de aguas termales en uno de los hoteles

Lo peor, sin duda alguna fueron los madrugones y las horas de bus. Para recorrer tantos kilómetros y ver tantas cosas era necesario levantarse todos los días del orden de las 5 de la mañana, para que diese tiempo a llegar a los sitios. Experiencias así no merecen llamarse vacaciones.




En aguas de Pamukkale



Una mañana en el teatro



En Estambul estuvimos dos días, los cuales nos cundieron mucho. El primero, y nada más llegar, nos fuimos a darnos un baño turco: sauna, limpieza y masaje con aceites. Era necesario quitarse el polvo de encima de los 5 días anteriores y la verdad es que uno salía como nuevo, oiga.


En Santa Sofía



En la cisterna turca

También tuvimos oportunidad de ver todo lo típico del lugar: Santa Sofía, La Mezquita Azul, La Torre de Galata, El Palacio de Topkapi, la cisterna.... Hasta nos metimos en un extraño lugar donde las cucarachas del baño no nos impidieron disfrutar de unas agradables caladas a una pipa de agua.


Fumando en pipa

Desgraciadamente la cámara tuvo dos incidentes que nos han impedido tener fotos de todos los sitios, al menos hasta que nuestros compañeros de viaje compartan sus fotos. Primeramente una mañana, estando aún dormidos, nos la dejamos en el hotel. Y, como no le pareció poco, el último día decidió estropearse :-(


Frente Santa Sofía


En la Mezquita Azul

Y así transcurrió nuestro viaje de 9 días por tierras turcas y nuestro viaje al extranjero anual. Una grata visita, totalmente recomendable. Todas las fotos, como siempre, en el álbum web.